Pantallas mexicanas de cine se unen para seguir brillando
Si el cine mexicano siempre ha tenido el reto de la distribución para poder subsistir, las salas de cine independiente sin duda la tienen más difícil. Debido a la pandemia por el nuevo Coronavirus, todos los cines en México sin excepción tuvieron que cerrar sus puertas para no concentrar gente.
Si las condiciones en diversas partes de la República Mexicana lo permiten, las salas estarían admitiendo gente al 30% de su capacidad desde el 15 de junio. Sin embargo, para las salas independientes mexicanas cada día cuenta y el tiempo sigue pasando; el panorama es incierto.
Ante esta problemática, 4 proyectos de exhibición que han fomentado el cine y la cultura desde hace varios años, se han unido como una sola fuerza, y han creado una estrategia para sobrevivir a esta crisis.
Se trata de una campaña de fondeo llamada «Ayuda a que las Pantallas sigan brillando«, en la que participa El Cine Club en Playa del Carmen; Cine La Mina en Guanajuato; Cine Too en Oaxaca; y Nayar Labcinema en Nayarit.
A través de un donativo, las personas interesadas estarán proporcionando los fondos mínimos para cubrir los gastos básicos de estos cuatro proyectos por 3 meses. Se cubrirán gastos como renta, servicios, y sobre todo, los sueldos de alrededor de 16 colaboradores (baristas, meseros, staff, cocineros, proyeccionistas, diseñadores, programadores, gestores, contadores) auxiliando también a sus familias en este momento tan complicado.
¿Qué es lo que tienes que hacer? Puedes apoyar ingresando a la página: https://bit.ly/Pantallas_Brillando para hacer tu donativo desde $100. Cada donativo tiene recompensas que podrás intercambiar el día que estos espacios vuelvan a abrir sus puertas.
¿Por qué donar? Cada uno de estos proyectos genera actividades de formación audiovisual, beneficiando a las comunidades locales, incluyendo a niños y jóvenes. En conjunto, tan solo en 2019, exhibieron 2,476 funciones, apoyando el cine que queda fuera de la exhibición comercial, del cual más del 30% fue cine mexicano, y llevándolo a 25,660 espectadores de localidades con poca oferta cultural.